7.8.07

Entendiendo


- ¿Por qué estás conmigo?

- Por lo mismo que vos.

- No creo. Te estoy hablando en serio.

- Porque... sos linda, limpita, simpática y la pasamos muy bien estando juntos.

- No estamos juntos, cojemos juntos nada más.

- El fuego de la pasión no deja tiempo para otra cosa.

- Quiero vivir con vos.

- ¿En casa de tu hermana?

- No, en cualquier lugar, un lugar tuyo y mío.

- ¿Me vas a proponer casamiento?

- No, vivir juntos, como hace la gente que se quiere.

- Así estamos bien, Alicia, no lo compliques.

- No es nada complicado, decíme que no y punto.

- No te digo que no, pero no ahora, mejor esperamos un poco y vemos que pasa.

- Yo sé lo que me pasa: Te metiste en mi vida y no puedo pensar en otra cosa. Decíme la verdad, decíme que no me querés, decíme que estabas caliente conmigo y que lo único que buscás es a alguien para echarte un polvo de vez en cuando.

- Pará, pará, pará, ¿qué te agarró? En todo caso la que estaba caliente conmigo eras vos, si no me equivoco. Dale, vamos, no te pongas así. Escúchame Alicia, yo no quiero joderte, sos muy linda mina, me gustás mucho, te quiero mucho, pero vivir en pareja es otra cosa. No es por vos. Yo no quiero sentirme atado a nadie, quiero estar solo. Es muy difícil de entender.

- No, para nada, ya entendí todo...


Diálogo en Roma, película de Adolfo Astiazarán (reconocimiento de escena...)